En el cambio de paradigma al que asistimos en el campo de los Recursos Humanos, hay otro punto relevante. Hasta hace un tiempo, el enfoque era el de atraer a los nuevos talentos, pero ahora, el escenario ha evolucionado y el reto es retener y potenciar a los que ya forman parte de la organización.
¿Cuáles son los problemas que han derivado en esta tendencia?
En los últimos tiempos, sobre todo desde la pandemia y los cambios de paradigma, se experimentó una gran fuga de talento. El talento comenzó a perder el miedo a dejar su empleo y buscar nuevas oportunidades y, en paralelo, surgieron tendencias como el burnout, la renuncia silenciosa o el quiet hiring, cuyo impacto en las organizaciones comenzó a ser significativo.